Avalada en varias y diversas rutas de razonamiento lógico, la dieta paleolítica, es una saludable forma de consumir alimentos donde se entiende que las costumbres alimenticias actuales son las causas más comunes de los trastornos degenerativos como el cáncer, el sobrepeso, la imposibilidad de tener hijos, los desequilibrios del azúcar en la sangre y muchos otros.
Desde esta perspectiva recomienda ciertos alimentos y desaconseja otros tales como los alimentos procesados o refinados. Así es como se considera bueno ingerir frutas y no la leche ni sus derivados; se incentiva el uso de vegetales pero no así los granos; tolera las carnes magras pero nunca los azúcares; invita a comer frutas secas como nueces y otras semillas pero no entra en sus menús el alcohol.
El secreto para una salud de hierro, de acuerdo a esta dieta de la «piedra tallada», es la obtención de proteínas sin grasas que permiten un buen tono muscular, huesos saludables y la sensación de plenitud que evita comer innecesariamente.
Nuestros Paleotips:
- Antes de comer piensa si una persona del paleolítico disponía de ese alimento ¿bebía bebidas cola? ¿comía patatas fritas? ¿y bollería?
- De esta forma estarás evitando conservantes y aditivos de todo tipo, somos muy semejantes genéticamente y nuestra alimentación ha cambiado demasiado de prisa.
- Agua natural sin gas, carnes y nada de gluten ni harinas; nada de azúcar ni sal excesiva ¡te quitarás un montón de problemas de encima! Sobre todo alergias e intolerancias
- La enorme cantidad de celíacos e intolerantes a la lactosa habla por sí sola; fuera la leche y fuera el trigo
- Esta dieta no es una cuestión de adelgazar sino de sentirse mejor ¿qué tal?
También la ingesta de vegetales es crucial en esta campaña por la salud y la larga vida. Eso por lo ricas que son las verduras y las frutas en antioxidantes y vitaminas, minerales y fibra.
Por otro lado, el incremento de frutas secas como las nueces traerán el aporte de grasas sanas, es decir, grasas no animales y que no pertenecen a las dañina grasas saturadas. También se pueden obtener estas grasas limpias, como el omega 3, de las semillas como el girasol, en el aceite de oliva y de los frutos de mar, como el pescado.
La información reflejada en este artículo es de fecha 20-08-2015. La casi totalidad de contenidos sobre los que informamos los organizan terceros y por tanto son ajenos a nosotros. Eso hace necesario que, al visitarlos, compruebes si las condiciones que existen en ese momento en sus medios de difusión siguen siendo éstas.