Aprende a usar el aceite de ricino en cuestiones distintas al clásico uso como purgante puesto que los médicos ya no recomiendan con el mismo fervor de ayer.
El aceite de ricino sigue siendo un gran ingrediente. No debemos subestimar este magnífico recurso que, como verás, puede serte muy útil en las artes de la estética personal, ya que sirve como cosmético y para poblar las pestañas y hacerlas crecer.
Te diremos, en lo que sigue, cómo aplicar este aceite en las zonas tratadas y siempre recordándote que la perseverancia es la que muestra los mejores resultados.
Primero limpia una brocha, la de un «rimel» en desuso, con aceite de oliva, que es el mejor solvente de este tipo de tintas. No deben quedar restos del rimel en los pelillos.
El siguiente paso es mojar el pincel en el aceite de ricino y aplicar, tanto en las cejas como en las pestañas. Repetir este rito antes de dormir de manera que el aceite de ricino se mantenga durante toda la noche haciendo su callado trabajo sobre los tejidos capilares.
También es útil para hacer crecer más el pelo porque el aceite de ricino contiene ácido ricinoleico y ácido grasos omega 9 que ayudan a mantener el cuero cabelludo libre de bacterias y hongos que minimizan el impacto de estos agentes sobre la salud de nuestro cabello.
Disfruta de estos secretos naturales y de la vida para vivir mejor.
La información reflejada en este artículo es de fecha 23-06-2015. La casi totalidad de contenidos sobre los que informamos los organizan terceros y por tanto son ajenos a nosotros. Eso hace necesario que, al visitarlos, compruebes si las condiciones que existen en ese momento en sus medios de difusión siguen siendo éstas.